Mads Mikkelsen, actor que ahora mismo brilla en la nominada al Oscar 'Otra ronda', tiene un importante coco en el futuro: relevar a Johnny Depp en el papel de Grindelwald, villano de la saga 'Animales fantásticos'. Semejante responsabilidad ha recaído en manos de este intérprete como consecuencia de aquel "despido" de Depp tras sus idas y venidas judiciales, un punto al que se llegó después de un largo camino de polémica y, según descubrimos ahora de boca de Mads, cierto casting "un poco humillante".
Hubo baile en torno al propio anuncio del nuevo fichaje, por lo que la situación ya sugería una incomodidad para todos los involucrados. Los medios estadounidenses se adelantaron a la confirmación de la propia Warner Bros., hecho que desmentía el propio Mikkelsen para finalmente recibir la llamada pendiente. "Oh, eso sigue siendo un rumor por el momento. Así que sé tanto como tú por los medios de comunicación. Estoy esperando esa llamada telefónica". Tras esto se anunció oficialmente el fichaje, una incorporación al reparto, que cuenta con Eddie Redmayne en cabeza, que se sopesó en un proceso... No demasiado fantástico para el propio protagonista de la cuestión.
"Algunas de las cosas eran interesantes, y otras cosas eran como: aquí es donde sientes que puedes perder tu confianza como actor por completo. De pie en una oficina con una persona que mira su periódico, y tu pretendes que tienes unos brazos largos y dices una línea. Sé que muchos castings se basan tan solo en primeras impresiones, ¿hay algo ahí que el productor y director consideren que recuerda al personaje que están buscando? Me parece de mala educación pedir a los actores que entren en una habitación y digan una línea mientras fingen que tiene brazos de 80 pies como el hombre de goma. 'Toma esa taza de café de allí', es como, ¿estás loco? Ni siquiera hay una escena aquí. Fue un poco humillante", explica Mikkelsen en declaraciones a Vulture.
¿Preparado para el mundo potterhead?
En la misma entrevista, Mikkelsen también quiso explicar cómo ha sido su relación con los fans hasta el momento, asegurando que se olvida siempre de lo conocido que es... hasta que quiere comprar una Coca-Cola. "[Desde que alcanzase la fama con 30 y tantos] nunca he comprado una Coca-Cola normal. Siempre es como, 'Aquí está su cola, maestro Mads', o 'coge tu maldita Coca-Cola y sal de mi tienda'. Ya no hay Coca-Cola neutral. Todos me sirven de una manera especial, con odio o con amor. Simplemente no había visto venir la fama. Pero esta bien. Lo llevé bien porque entendí que no se trataba de mí, sino del concepto de mí. Afortunadamente no tenía 17 años, cuando te puedes creer todo, puedes creer que eres especial. Eso sí, lo olvido todos los días que salgo. Salgo por la puerta y alguien dice: 'Oye, ¿te puedo sacar una foto?' Entonces me despierto y recuerdo que sí, soy ese tipo". Verás cuando se convierta en Grindelwald... Ese otro nivel de fama.