Armie Hammer rompe su silencio. El actor de 'La red social' pasó de ser la comidilla y objeto de mofa a principios de 2021 por rumores de fetiches sexuales extremos, incluido el canibalismo, a ser acusado de violación meses después. La policía inició una investigación y él acabó perdiendo todos los trabajos que tenía pendientes de rodar. Hace unos meses reapareció como empleado en un resort en las Islas Caimán, donde tenía su residencia habitual.
En una entrevista con la revista Air Mail, la primera desde las acusaciones, Hammer ha decidido no dejar nada en el tintero, incluida su relación con el sexo y sus tendencias de dominación. Achaca su inclinación hacia el BDSM (relaciones sadomasoquistas) a que fue víctima de abuso sexual a manos de un pastor a cargo de jóvenes cuando él tenía 13 años: "Lo que me hizo fue introducir la sexualidad en mi vida de una manera que estaba completamente fuera de mi control. Yo estaba indefenso en esa situación. No tenía voz en la situación. Me introdujeron en la sexualidad de una manera terrorífica y en la que no tuve control. Mis intereses fueron hacia: quiero tener el control de la situación, sexualmente".
El actor de 'El llanero solitario' admite que "las dinámicas de poder" en sus relaciones pasadas "no estaban bien", y asegura que fue abusivo con varias mujeres "al millón por ciento". Asegura que sabe que había "un desequilibrio de poder" porque ellas eran más jóvenes que él y él se encontraba en el punto más alto de su carrera.
Sin embargo, vuelve a negar haber cometido ningún crimen, y dice que contempló suicidarse cuando fue acusado de violación: "Caminé hacia el océano y nadé lo más lejos que pude con la esperanza de ahogarme, de ser golpeado por un barco o comido por un tiburón. Luego me di cuenta de que mis hijos seguían en la cosa y no les podía hacer eso".
Robert Downey Jr. y la cultura de la cancelación
Hammer también habla del papel que ha tenido Robert Downey Jr. en su camino hacia la rehabilitación: "Hay ejemplos por todas partes, Robert es uno de ellos. Personas que han pasado por cosas como esta y han encontrado la redención y un nuevo camino. Eso, creo, es lo que se está perdiendo en este negocio marcado por la cultura de la cancelación y mafias progres. Al minuto que alguien hace algo mal, le tiran. No hay oportunidad para la rehabilitación. Cuando tiran a alguien como yo al fuego para protegerse, lo único que hacen es hacer el fuego más grande. Y ese fuego ahora está fuera de control y va a quemar a todo el mundo".
El protagonista de 'Call Me By Your Name' asegura haber aprendido: "Estoy aquí por mis propios errores, me responsabilizo del hecho de que fui un imbécil, de que fui egoísta, de que utilicé a la gente para sentirme mejor y que cuando había terminado, seguía con mi vida. Ahora soy una persona más sana, más feliz y más equilibrada. Puedo estar para mis hijos de una manera que nunca estuve. Estoy verdaderamente agradecido por mi vida y mi recuperación, y por todo. No volvería y desharía todo lo que me ha pasado". Cuenta que, en el futuro cercano, se va a ir a vivir con otro adicto que acaba de salir de rehabilitación para ayudarle a mantenerse sobrio: "Parece que mi recuperación ha dado un giro de ser quien necesita ayuda para mantenerse sobrio a tener la capacidad de ayudar a otros".