El pasado viernes llegó a los cines 'Duna: Parte Dos', la secuela de la epopeya de ciencia ficción dirigida por Denis Villeneuve, un filme que ha recibido reacciones muy positivas por parte de crítica y público y que se ha convertido en el mejor estreno de lo que llevamos de año en nuestro país.
Uno de los aspectos más destacados de la cinta es la aterradora presencia de Austin Butler. El actor encarna a Feyd-Rautha, antagonista sanguinario que pretende suceder al emperador (Christopher Walken). Sobre la construcción de su personaje, Butler ha desvelado que improvisó un detalle de una secuencia que acabó en el montaje final.
Ha sido en una entrevista con Access Hollywood donde el intérprete ha hecho referencia al momento en el que da un beso a Stellan Skarsgård, su tío en la ficción, detalle que estaba fuera del guion. "Se trata de intentar afectar a la otra persona", explicó el artista para dar sentido a su decisión.
Un método no tan peligroso
Butler es conocido por preparar a fondo sus personajes y mimetizarse con ellos durante largos periodos de tiempo. Sin embargo, para interpretar al villano creado por Frank Herbert, decidió establecer una distancia para no poner en peligro a las personas que le rodean, a sus familiares y amigos.
Butler es una de las estrellas más prometedoras de su generación y ha colaborado con cineastas como Jim Jarmusch ('Los muertos no mueren'), Quentin Tarantino ('Había una vez en... Hollywood') o Baz Luhrmann ('Elvis'), por la que recibió su primera nominación al Oscar y ganó el BAFTA y el Globo de Oro. Este año ha estrenado 'Los amos del aire', miniserie bélica producida por Steven Spielberg y Tom Hanks para Apple TV+.