Hay series de Netflix que deberían contar con un cartel de la Organización Mundial de la Salud advirtiendo que se tratan de productos altamente adictivos. Una de ellas es 'Bridgerton', un autentico fenómeno que reinventa el periodo de la Regencia en Inglaterra con la adaptación de las novelas de Julia Quinn. Las pasiones de la alta sociedad han hecho las delicias de la audiencia que, tras devorar la tercera temporada, ya espera con ansias la cuarta.
Cabe señalar que la plataforma de streaming se ha tomado sus licencias con respecto a la saga literaria haciendo protagonistas de la tercera tanda a Colin Bridgerton (Luke Newton) y Penelope Featherington (Nicola Coughlan), a pesar de que su historia no llega hasta el cuarto libro, 'Seduciendo a Mr. Bidgerton'. El tercero, 'Te doy mi corazón', sitúa en el centro a Benedict (Luke Thompson), al que hemos podido conocer más a fondo a lo largo de los últimos capítulos preparando así su futuro en la serie.
En la primera parte de la tercera temporada, el segundo de los hermanos Bridgerton conoce a Lady Tilley Arnold (Hannah New), con quien pronto inicia una relación puramente sexual. Es en la segunda parte donde ella le presenta a su mejor amigo Paul Suarez (Lucas Aurelio) hasta que los tres terminan compartiendo cama. Tras este encuentro, la viuda de Lord Arnold anima a Benedict a experimentar su bisexualidad sin miedo a lo que piense la gente.
¿Llega de esta forma la diversidad LGTBI a 'Bridgerton? No sería descabellado que la serie producida por Shonda Rhimes optara por regalarnos con Benedict a su primera pareja protagonista gay, algo a lo que incluso ya se ha referido el actor que lo interpreta: "Benedict tiene una apertura y una fluidez maravillosa en lo que a él respecta, y es muy, muy divertido de interpretar porque podría pasar cualquier cosa".
De momento, 'Bridgerton' no ha presentado a Sophie Beckett, interés amoroso de Benedict al más puro estilo Cenicienta en 'Te doy mi corazón'. En las páginas, ambos se encuentran en un baile de disfraces que ya mencionan Benedict y Eloise (Claudia Jessie) en el último capitulo de la tercera. ¿Se tomará la serie una de sus licencias en favor de la diversidad?
La que sí ha vivido una de estas licencias es Francesca (Hannah Dodd), otra de las hermanas Bridgerton que a lo largo de la tercera temporada ha visto incrementado su protagonismo hasta el punto de contraer matrimonio con Lord John Stirling (Victor Alli). Teniendo en cuenta que cada uno de los vástagos Bridgerton protagoniza una temporada, esto solo quiere decir que la vida sentimental de la joven aún no está resuelta.
Volviendo a los libros, en el sexto, titulado 'El corazón de una Bridgerton' con Francesca como protagonista, la joven enviuda después de que su marido muera a causa de un aneurisma. En este momento entra en juego el primo del fallecido, Lord Michael Stirling, que acaba enamorado de Francesca hasta que entre ambos acaba surgiendo algo más.
Este personaje, el de primo, ya se nos ha presentado al final de la tercera temporada aunque, eso sí, en forma de prima. Michaela Stirling (Masali Baduza) llega en el baile de los Dankworth-Finch. "Todos los detalles sórdidos que John te ha contado sobre mí son mentira. La verdad es mucho peor", le dice a Francesca. ¿Se avecina pasión lésbica?
Habrá que esperar para la cuarta
Sin confirmación oficial por parte de Netflix, parece bastante seguro que en la cuarta temporada le tocará el turno a Benedict. No solo porque colaran la historia de Penelope y Colin, sino porque al actor que interpreta a este se le escapó en una entrevista: "No puedo esperar a ver la historia de Benedict la próxima temporada".
Lo que sí está claro es que tendremos que esperar más de la cuenta para disfrutar de la nueva tanda de capitulos. Durante la premiere de la Parte 2 de la Polin Season en Londres, la showrunner de la serie, Jess Brownell, confirmó a The Hollywood Reporter que la cuarta temporada del fenómeno romántico no llegará hasta dentro de dos años. Es decir, hasta 2026.
"Estamos trabajando para intentar sacar las temporadas más rápidamente, pero lleva ocho meses grabar y luego tienen que editarse y doblarse a todos los idiomas", explicó la showrunner en la premiere. "Escribirla también lleva mucho tiempo, así que vamos a ritmo de dos años, estamos intentando acelerarlo, pero será más o menos en esa franja de tiempo", alegó, aprovechado para dejar claro que la espera merecerá la pena: "Estoy muy emocionada con lo que estamos escribiendo".