¡Cuidado! Este artículo contiene spoilers
El quinto episodio de la séptima temporada de 'Game of Thrones' ha sido una locura. Personajes que viajan y desviajan, casas que desaparecen, hermanas que se enfrentan, embarazos reales (¿falsos?), zombis que se acercan y meñiques que conspiran. Uno de los capítulos más cargados de giros que se recuerdan en una serie que antaño fue paciente, calmada y exigente.
Sin embargo, una de las bombas más importantes de 'Guardaoriente' ha caído silenciosa, solo perceptible para los fans más atentos. Ha ocurrido en la escena en la que Sam, allá en la Ciudadela, decide de una vez por todas abandonar su beca como Maestre y volver al norte con Gilly, el niño y un montón de libros robados.
Pero justo antes de eso, Gilly ha dado con un trozo de la Historia de Poniente que podría cambiarlo todo en el conflicto actual. Lo hace repasando los diarios del Septón Supremo Maynard, que sirvió al Rey Loco, Aerys Targaryen, padre de Daenerys. En esas aburridas memorias, en las que el septón apuntaba hasta cuántas ventanas tenía el Gran Septo de Baelor y cuántas veces iba al baño al día, Gilly recita un detalle que le parece poco más destacable.
"Maynard cuenta aquí que ordenó una anulación para el Príncipe "Ragger", y le volvió a casar con otra mujer al mismo tiempo en una ceremonia secreta en Dorne. ¿Es eso común en el sur?". Sam ni siquiera está escuchando a su señora, absorto en su propia decisión de abandonar la Ciudadela, pero los espectadores más avispados habrán gritado a la pantalla en ese momento.
El Príncipe "Ragger" es más bien Rhaegar Targaryen, el hermano mayor de Daenerys. El mismo que la temporada pasada descubrimos que era el padre de Jon Snow, junto con Lyanna Stark, la hermana de Ned. Confirmamos así la famosa teoría R+L=J que convierte a Jon en un Targaryen, aunque sea por un embarazo ilícito.
La cuestión es que con este no-descubrimiento por parte de Gilly y Sam, que no tienen ni idea de quiénes son los padres reales de Jon (la única persona viva que lo sabe es Bran, o más bien el Cuervo de Tres Ojos), la guerra por el Trono de Hierro podría dar un giro de 180 grados. Porque si Rhaegar y Lyanna se casaron en secreto en Dorne, como da a entender este escrito, Jon sería entonces su hijo legítimo. Es decir, sería el heredero legítimo del hijo del último rey Targaryen. Su reclamo del Trono de Hierro sería entonces más apto que el de Daenerys, por ser el hijo legítimo del heredero al trono. Un cambio del status quo que está siendo pasado por alto por todos los personajes.
¿Se sabrá algún día?
Por el momento, las dos pistas que han confirmado el origen real de Jon Snow (Jon Targaryen, ya por derecho propio) han servido más de guiño al espectador que de revelación para los habitantes de los Siete Reinos. El flashback que nos mostró a Ned Stark jurándole a su hermana que cuidaría de Jon fue presenciado solo por Bran, quien ahora parece estar por encima del bien y del mal y muestra muy poco interés por revelar a sus allegados los secretos de la Historia de Poniente. No les ha contado a sus hermanas que sabe que Meñique es una araña infecta que debería estar ya fuera de Invernalia hace muchas nevadas, y la excusa parece ser lo que él mismo confesó: ya no es tanto Bran Stark, sino el Cuervo de Tres Ojos, y su papel en el mundo es otro (aún no nos queda muy claro cuál).
Ahora, Sam y Gilly ni huelen el gran descubrimiento que acaban de hacer, absortos en sus propios problemas y desconocedores de que Rhaegar es el padre de Jon. ¿Veremos en el futuro cómo Sam acaba uniendo los puntos y volviendo a los diarios del Septón Supremo Maynard? Puede ser. Además, esa revelación enfrentaría a Jon y Daenerys, quienes están desarrollando una curiosa relación en la que asoman tintes románticos. Si descubren que Jon no solo es Targaryen (y sobrino de Daenerys), sino que es el heredero del Trono de Hierro por encima de ella, ¿cómo afectará eso a la pareja? Ya no es que les "corte el rollo" (los Targaryen se casaron entre hermanos durante siglos para no "ensuciar" la sangre, ¿a alguien le cae bien esta familia?), es que él se estaría interponiendo entre la Khaleesi y lo que más ha querido durante toda la serie: el poder. Y ya sabemos que esta chica no se toma muy bien que le nieguen lo que "por derecho" le pertenece.
Hay muchas incógnitas y muchas posibilidades en el futuro, y por suerte o por desgracia llegarán más temprano que tarde. Quedan dos episodios de temporada, y después tendremos una última tanda de seis capítulos para cerrar 'Game of Thrones' para siempre.