Por mucho que nos cueste, tenemos que ir asimilando que 'Game of Thrones' llegará a su fin en 2019, y aunque todavía quedan unos meses por delante hasta que se estrene la octava y última temporada de la ficción de HBO, podemos recrearnos con las teorías que han ido surgiendo. Numerosos fans han compartido en internet y en las redes sociales lo que piensan que ocurrirá en los capítulos venideros, pero no han sido los únicos, ya que hasta el mismísimo Robb Stark ha opinado respecto al final de la serie.
Richard Madden, quien interpretó a Robb Stark en 'Game of Thrones', también tiene algo que decir respecto al posible final de la serie, aunque lo diga bromeando: "Jon Snow salva el día y mata a todo el mundo. La gente a veces me pregunta si sé qué es lo que va a pasar, pero no lo sé, aunque voy a empezar a inventarme las cosas".
Puede que Madden no sepa qué va a ocurrir, pero alguien que sí lo sabe es Nikolaj Coster Waldau, el actor que interpreta a Jaime Lannister. Recientemente el actor comentó lo siguiente respecto al final de la serie: "Leí el guión y les ecribí a Dan Weiss y a David Benioff para decirles que no creía que pudieran haber hecho un trabajo mejor que ese". Además avisa que no habrá callejones sin salida: "¿Conoces esas series en las que hay el misterio de un asesinato y en el último minuto te das cuenta de que no tienen sentido? Aquí todas las piezas encajan en este gigantesco puzle".
La relación entre Jaime y Cersei Lannister
Una de las tramas más interesantes de 'Juego de Tronos' ha sido la de Jaime y Cersei Lannister, y durante una entrevista con The Wrap, Nikolaj Coster Waldau diseccionó la relación de los hermanos y amantes, además de comentar lo que el futuro les puede deparar. "Toda su vida ha girado en torno a: «¿Cómo puedo proteger a mi hermana? ¿Cómo puedo navegar en este mundo y estar cerca de ella, para protegerla? » Y entonces, en los últimos años ella ha estado en un peligro constante. Quiero decir... él lo ha intentado y en la séptima temporada ha pensado, creo yo, que tenía su confianza, pero cuando ella le revela que tiene unos planes diferentes y que Qyburn es ahora su aliado más cercano... Creo que eso le dejó en shock".
Después de que Jaime hiciera tantos sacrificios por su gemela, Coster Waldau cree que a Jamie le afectaron mucho las acciones de Cersei: "Tienen un futuro juntos y posiblemente puedan tener otro hijo. Sin embargo, ella está dispuesta a arriesgarlo todo por algo que no tiene sentido. Además de eso, ellos han dado su palabra a todo el mundo, y ella tan solo está centrada en esta cosa que ha intentado matarla... Creo que por un momento Jaime la ve de la misma forma que la ve el resto del mundo. Y eso le sorprende. Eso y el hecho de que por un segundo ella parecía estar dispuesta a dejar que la Montaña le matara. Creo que eso le rompió el corazón".
Nikolaj Coster-Waldau más allá de 'Juego de Tronos'
Debut en la gran pantalla
Con 24 años, Nikolaj Coster Waldau debutaba en el cine con 'El vigilante nocturno', psychothriller danés con ecos al slasher dirigido por Ole Bornedal.
En él, encarnó a Martin, un estudiante de derecho que acepta un trabajo como vigilante nocturno en una morgue. Con la intención de poder invertir lo que parecerán ser unas jornadas laborales tranquiles en poder estudiar, pronto verá como la aparente calma del lugar se convierte en algo aterrador que parece estar relacionado con las andanzas de un peligroso asesino en serie que anda suelto.
El propio Bornedal dirigiría en 1997 el remake yankee, 'La sombra de la noche', protagonizado por Ewan McGregor, Patricia Arquette y Nick Nolte.
Llegada a Hollywood
Tras varios años participando en series y películas en Dinamarca, Nikolaj Coster Waldau debutó en Hollywood en el 2001 por partida doble.
Tras un pequeño papel en 'Enigma' de Michael Apted, junto a Kate Winslet y Dougray Scott, el público también le pudo ver como el personaje de Gordon en 'Black Hawk derribado', otro rol breve en el film que dirigió Ridley Scott y en el que compartía protagonismo con Josh Hartnett, Ewan McGregor, Sam Shepard y Eric Bana, entre otros.
Papeles secundarios
Aún sin tener su propio espacio dentro de la industria, durante unos años Nikolaj Coster Waldau tuvo que conformarse con pequeñas apariciones en títulos que pasaron un tanto desapercibidos, siendo un claro caso de ello el de 'Wimbledon (El amor está en juego)', comedia romántica británica dirigida por Richard Loncraine.
En ella, el actor danés tuvo un pequeño papel como Dieter Prohl, compañero del tenista Peter Colt, a quien interpretó un Paul Bettany que se enamoraba de la tenista Lizzie Bradbury, interpretada por Kirsten Dunst.
Coqueteos con el cine épico
Fue en el 2005 cuando pudimos ver a Nikolaj Coster Waldau por partida doble en sendos films de corte épico.
Repetiría junto a Ridley Scott en 'El reino de los cielos', el título sobre las Cruzadas protagonizado por Orlando Bloom, Eva Green y Liam Neeson, donde fue el Comisario de la Villa.
En 'La sombra de la espada', el danés fue el principal protagonista en una historia dirigida por Simon Aeby y en la que encarnó a Martin, un hombre enfrentado a su mejor amigo de la infancia durante la oscura etapa de la Inquisición en la Europa del siglo XVI.
Última oportunidad
En el 2006 Nikolaj Coster Waldau repetía a las órdenes de Richard Loncraine en 'Firewall', donde fue Liam.
El film remakeaba 'Bellman and Tue', título de 1987 dirigido por el propio Loncraine, y estaba protagonizado por Harrison Ford, un profesional de la seguridad informática de una entidad bancaria que verá como su vida da un giro de 180 grados cuando descubra que todos sus movimientos están siendo observados por alguien.
Regreso a Dinamarca
Siendo consciente de que lo suyo estaba destinado a roles secundarios, entre 2007 y 2010 la carrera de Nikolaj Coster Waldau volvió a producirse en su Dinamarca natal, donde volvió a participar como actor principal en varios títulos, como por ejemplo 'Death in Himmerland', cinta policiaca dirigida por James Barclay.
En el 2008, protagonizó 'New Amsterdam', donde fue un policía inmortal que ponía toda experiencia de cuatro siglos para resolver casos.
Thriller nórdico y western español
El mismo año en el que Nikolaj Coster Waldau se convertía en el Jaime Lannister de 'Juego de Tronos', protagonizaba 'Headhunters'.
Dirigido por Morten Tyldum, el film noruego era una adaptación de una novela de Jo Nesbo, donde era Clas Greve, el propietario de una valiosa obra de arte que se convertirá en el objetivo de Roger (Aksel Hennie), un cazatalentos cuya verdadera profesión es la de ser un ladrón de piezas de artísticas.
Ese mismo año también fue uno de los protagonistas de 'Blackthorn. Sin destino', el western dirigido por Mateo Gil y que protagonizó junto a Eduardo Noriega, Sam Shepard y Stephen Rea.
Vuelta al terror
En 2013 fue cuando Nikolaj Coster Waldau volvía al terror después de haber debutado en el género en 1994 con 'El vigilante nocturno', en un film dirigido por Andy Muschietti y producido por Guillermo del Toro, 'Mamá'.
En ella, interpretó a Lucas, el nuevo padre de las hijas de su hermano fallecido. Junto a su novia Annabel (Jessica Chastain) deberá cuidar a las niñas, que han permanecido desaparecidas durante unos años y que han traído consigo lo que parecer ser una entidad sobrenatural que no se despega de ellas.
Regreso a Hollywood
El mismo año de 'Mamá' y ya convertido en una estrella de la pequeña pantalla, podríamos decir que Nikolaj Coster Waldau regresaba a Hollywood, donde volvía a tener la oportunidad como actor, esta vez con roles de con un poco más de peso que en su anterior etapa.
Así fue como le pudimos ver junto a Tom Cruise, Olga Kurylenko y Morgan Freeman en 'Oblivion', el film de ciencia ficción dirigido por Joseph Kosinski fue Sykes, un experto militar aliado con los protagonistas para combatir a los extraterrestres.
Presente y futuro
En los últimos años, el actor ha sabido compaginar su trabajo en 'Juego de Tronos' con producciones tanto de Dinamarca como de Estados Unidos.
A Nikolaj Coster Waldau le pudimos ver en 2014 en 'Una segunda oportunidad', histérico drama de Susanne Bier, realizadora danesa con la intensidad por bandera. Ese mismo año, estuvo en la comedia romántica 'No hay dos sin tres', junto a Cameron Diaz, Kate Upton y Leslie Mann.
En 2016, fue Horus en 'Dioses de Egipto', el blockbuster con borrachera de CGI incluida de Alex Proyas, mientras que en 2017 protagonizó para Netflix 'Pequeños delitos', título dirigido por E.L. Katz, rodó en Dinamarca a las órdenes de Jens Dahl el thriller '3 things' y estuvo en 'Shot Caller', de Ric Roman Waugh.
¿Su próximo trabajo para el cine? Protagonizar 'Domino', lo nuevo de Brian de Palma junto a Guy Pearce.