El motivo no sorprende porque, tristemente, durante años se ha fomentado tanto la inseguridad como la rivalidad femeninas en Hollywood. Lo bonito es que, como parte del cambio que pretenden impulsar las mujeres de la industria, Alyssa Milano ya sea capaz de interpretar el drama que se viviese en el rodaje de 'Hechiceras' como lo que fue: el resultado de una competitividad malsana.
Lo ha hecho en declaraciones a Entertainment Tonight, medio en el que Milano explica cómo es ahora su relación con Shannen Doherty, actriz con la que viviese un sonado enfrentamiento mientras trabajasen juntas en la mencionada serie de finales de los 90. La tensión tras las cámaras llegó a tal punto que Doherty terminó protagonizando un sorprendente abandono de la ficción en el final de su tercera temporada.
Ante aquello Milano afirma que "podría asumir la responsabilidad por gran parte" de dicha tensión que hubo entre ambas. "Creo que una gran parte de aquella lucha entre nosotras vino de sentir que tenía que competir [con Doherty] en lugar de poder vivir esa hermandad que tanto peso tenía en la serie. Siento algo de culpa por el papel que jugué en todo aquello".
El tiempo...
... lo cura todo. Al menos en lo referente a la pelea entre estas actrices que, en la actualidad no son las mejores amigas del mundo pero tienen un trato "cordial". De hecho Milano cuenta que en el momento en que se enteró de que su excompañera de reparto había sido diagnosticada con un cáncer de mama, no dudó en ponerse en contacto para mostrarle su apoyo.
"Cuando me enteré de su diagnóstico, me puse en contacto con ella, y le envío DMs cada dos meses más o menos para saber cómo sigue", cuenta la intérprete que encarnase a Phoebe, una de las hermanas Halliwell.
"La respeto. Es una gran actriz que ama muchísimo a su familia. Desearía haberme sentido lo suficientemente fuerte como para reconocer eso por aquel entonces". Milano admite así que sus propias inseguridades la llevaron a ese punto de conflicto con Doherty, que parece ha quedado en el pasado.