Se podría decir que Emma Stone se está volviendo toda una experta en cuanto a momentos incómodos se refiere. Durante la entrega de los premios Oscar la actriz fue protagonista del embarazoso abrazo fallido con Damien Chazelle, después de que este ganara el galardón a mejor director por la película 'La La Land: Una historia de amor'.
Pero ha aprendido y ahora ha sido el turno de Jennifer Lawrence de ponerse en la posición en la que estuvo Stone hace unos meses.
Jennifer Lawrence se encontraba en el Festival de Cine de Toronto presentando su nueva película '¡Madre!', mientras que Emma Stone presentaba 'La batalla de los sexos'. Las actrices coincidieron durante un encuentro con la revista Variety y fue entonces cuando Lawrence se acercó a abrazar a Stone. Sin embargo, el momento no resultó como esperaba, pues a Stone le pilló por sorpresa el abrazo y todo terminó de una forma muy incómoda.
Las dos cuentan ya con una amplia trayectoria cinematografía y, de hecho, ambas han sido ganadoras del Oscar a la mejor actriz. Además, Jennifer Lawrence lideró por dos años consecutivos la lista de Forbes de las intérpretes mejor pagadas. Hasta este año, en el que Emma Stone se ha convertido en la mejor pagada, desplazando a Lawrence a la tercera posición. No sabemos si la competencia profesional entre las dos actrices podría haber generado algún resquicio en la buena relación que mantenían hasta el momento, pero desde luego no es la reacción que cabría esperar ante un encuentro como este.
Reciente polémica
'¡Madre!', protagonizada por Jennifer Lawrence, se estrenará el próximo 29 de septiembre y de momento ha obtenido opiniones divididas. A las críticas mixtas se suma el intento de boicot por parte de algunos usuarios de Twitter tras unos comentarios de la actriz durante una entrevista con Channel 4 que fueron sacados de contexto.
Según los usuarios, Lawrence acusaba a Donald Trump de ser responsable de los huracanes Harvey e Irma. Sin embargo, la actriz no dudó en responder a través de su cuenta de Facebook a aquellos que la criticaban, argumentando: "Mis respuestas fueron descaradamente sacadas de contexto. Obviamente nunca afirmaría que el Presidente Trump sea el responsable de estos trágicos huracanes" y que lo que de verdad importaba era pensar en cómo ayudar a los afectados.