Hace una semana llegaba a la cartelera la cinta que nos devolvía a Jennifer Lopez a la gran pantalla tras unos años en los que solo estrenó 'Jefa por accidente'. Con su nueva película la cantante y actriz se metía en la piel de Ramona, una stripper que lidera a un grupo de bailarinas que intentan estafar a sus clientes, pesos gordos de Wall Street.
Pero en la vida real, Lopez ya no se mueve por la cantidad de ceros que llevan sus cheques y en una entrevista para la revista de GQ (donde ha sido nombrada icono del año) habló sobre el tipo de acuerdo que la llevó al filme: "Hago cosas porque las amo. No me pagaron un montón de dinero por 'Estafadoras de Wall Street'. La hice gratis y la produje. Confío en mí misma. Esa es Jenny del Block. Hago lo que quiero, hago lo que amo. Pero tuve una mentalidad realmente diferente para interpretar a Ramona".
Parece que el valor del personaje tuvo mucho que ver en esta decisión, poniendo en valor el carácter de Ramona: "Una de las cosas que me encantó de Ramona fue que tenía su propio conjunto moral y valores" ... "Por eso ella podía decir, 'F- ellos. Estos tipos son unos imbéciles. Ni siquiera van a extrañar este dinero'. Porque cuando estás cerca de delincuentes, te conviertes un poco en criminal. Pero sentí que Ramona era, en muchos sentidos, una buena persona", añadía la cantante de 'On the Floor'.
Carrera al Oscar
'Estafadoras de Wall Street' partía de un presupuesto de 20 millones de dólares y durante su estreno consiguió unos impresionantes 31 millones en la taquilla americana. A día de hoy ya acumula 43 en el mercado internacional y 148 en los Estados Unidos, sonando la posibilidad de que Lopez sea nominada a los Oscar. "Saben que somos todas mujeres productoras, directoras, escritoras, todas las mujeres protagonistas. Y nos apropiamos de eso. Hemos estado viendo a los hombres aprovecharse de las mujeres en las películas durante mucho tiempo. Así que fue divertido ver cómo se vuelven las cosas del revés", declaraba la intérprete.
