La muerte de Tony Stark en 'Avengers: Endgame' dejó huérfanos a los fans del Universo Cinematográfico Marvel. En el que fue el gran final de la primera etapa del UCM, Robert Downey Jr. se despedía del personaje 11 años después de empezarlo todo con 'Iron Man', la primera película de la Saga del Infinito. El golpe fue duro (y no fue la única pérdida que nos dejó el final), pero los Russo, directores de la película, no se arrepienten de aquello.
De hecho, en una entrevista reciente con Vanity Fair, con motivo del estreno de su último trabajo como directores, 'The Gray Man', los Russo han desvelado que tuvieron resistencia por parte de Jon Favreau, director de la franquicia individual de 'Iron Man' e intérprete de Happy Hogan en el UCM. Según cuentan, Favreau llegó a rogarles que no mataran a Iron Man.
"Parte de la presión [de no matar a Iron Man] vino de Jon Favreau, que nos llamó después de leer el guion y nos dijo '¿De verdad vais a matar a Iron Man?'", recuerda Anthony Russo, a lo que Joe añade: "Recuerdo hablar con Favreau por teléfono, como intentándolo convencerlo de que no se tirara por la cornisa. Me dijo: 'No podéis hacer eso. Va a destrozar a la gente, y no queréis que salgan del cine y hacia el tráfico'. Pero lo hicimos igualmente".
'Avengers: Endgame', que cerró la primera década de Marvel Studios con 2.798 millones de dólares recaudados en todo el mundo, marcó el final de la experiencia de Robert Downey Jr. en el Universo Marvel, despidiéndose con el sacrificio de Tony Stark para derrotar a Thanos. Según los Russo, Downey Jr. lloró cuando se enteró de que Iron Man iba a morir en la película.
Un trabajo fácil
En la misma entrevista, los Russo siguen recordando el paso de Robert Downey Jr. por el Universo Marvel, bromeando que, gracias al hecho de que su personaje era CGI gran parte del tiempo, el actor ni siquiera tenía que ir al rodaje. "Algunos tienen suerte, como Evans, que cuando se pone el casco, es un doble de acción", dice Joe Russo. "Ya conocéis a Robert, creo que la razón por la que interpretó a Iron Man durante una década es porque nunca tenía que ir al set. En cuanto Iron Man se ponía el traje, Robert desaparecía".
