Con el fin del verano y la llegada del frío al gran público le apetecen más las películas de terror. Así lo demuestra el gran resultado que consiguió el año pasado en taquilla 'It (Eso)', la película de Andy Muschietti batió todos los récords en el otoño de 2017. Y lo mismo se ha propuesto conseguir este año 'La Monja', la nueva película de la franquicia 'El Conjuro'. Según las predicciones, se prevé que la película consiga 32 millones de dólares en su fin de semana de estreno en Estados Unidos, pudiendo llegar incluso según algunas estimaciones a los 37 millones.
Aunque todavía son cifras que se alejan de los excelentes 123 millones que consiguió 'It', cifra por la cual se aseguró una secuela que ya se está preparando, el posible resultado de 'La Monja' sería un gran dato que la colocaría como una de las películas más taquilleras de una franquicia que ya ha generado más de 1.100 millones de dólares en todo el mundo.
La quinta película de la franquicia
La película se trata de un spin-off de la película 'El Conjuro 2', que ya introdujo a Valak, un demonio al que se enfrentarán los protagonistas. 'La Monja' está centrada en la historia de un sacerdote con conocimientos paranormales y una novicia que son enviados por el Vaticano a investigar el misterioso caso del suicidio de una monja en el Monasterio de Carta en Rumania. Pero descubrirán un secreto ancestral sobre un demonio (Valak) en forma de monja, que hará que no puedan volver a cerrar los ojos en la oscuridad.
Junto a Taissa Farmiga, que interpreta a la hermana Irene, están Charlotte Hope, el nominado a un Oscar Demián Bichir, Jonas Bloquet, Jonny Coyne, Mark Steger y Bonnie Aarons que retoma el papel de la monja.
Tras anunciarse en un principio que su estreno sería el 18 de julio, finalmente la película de Warner y New Line Cinema se ha retrasado hasta el final del verano y se estrenará el próximo 7 de septiembre.
Guía para no perderse en el Universo 'Expediente Warren'
'Expediente Warren'
Cuando uno se acerca a una película intenta desprenderse de todas las expectativas que se haya podido crear para, primero, no perder la opción de descubrir un entusiasmo genuino e inesperado, o, segundo, no llevarse una decepción de las que duelen de verdad. Con 'Expediente Warren' era casi imposible no sentarse en la butaca con las manos preparadas para aplaudir ya que, desde su estreno en los cines estadounidenses, la película de James Wan se había dedicado a coleccionar críticas entusiastas. Y, todo eso, siendo una película de terror, ese género que necesitaba con urgencia una película a la altura de sus grandes clásicos.
Efectivamente, 'Expediente Warren' era ESA película que nos habían vendido. De hecho, puede que fuera más. Siempre es bueno encontrarse con una cinta de terror que asuste, que te haga dar saltos en la butaca y volver a casa encendiendo todas las luces que encuentres por el camino, pero es que, además, Wan consiguió todo eso a través de la nostalgia, del homenaje honesto y entregado a algunos de los grandes clásicos y referentes del género. Al final, resulta que el truco no estaba en la sangre, las tres dimensiones o los remakes, no, el triunfo estaba en conseguir que todos los miedos universales y los viejos trucos, puertas que se abren, ruidos desconocidos o muñecas inquietantes, parecieran nuevos. En definitiva, un clásico contemporáneo.
'Annabelle'
Entre la multitud de elementos inolvidables con los que contaba 'Expediente Warren', hubo uno que se instaló con especial intensidad en la memoria colectiva: Annabelle, la perturbadora muñeca que necesitaba las escenas justas para pasar a la posteridad. Un impacto terrorífico que, para los siempre atentos y hambrientos estudios de Hollywood, justificaba por completo una película centrada exclusivamente en su historia.
O algo parecido, porque la cinta resultante, 'Annabelle', parecía más empeñada en ser una revisión tosca y aburrida de 'La semilla del diablo' + 'Poltergeist' que una propuesta con una entidad propia y atractiva. Puede que la crítica se pasara con su linchamiento, su primera mitad era correcta, pero no deja de ser, hasta la fecha, el peor producto estrenado bajo la marca Warren.
'Expediente Warren: El Caso Enfield'
Con una primera hora cercana a la perfección, 'Expediente Warren: El Caso Enfield' se volvía a servir de una historia real para proponer un auténtico tour de force en el que la taquicardia mantenida era de nuevo la protagonista principal. James Wan, sobresaliente otra vez, apostaba por mantener la fórmula que hizo grande a su predecesora pero aumentando las dosis en todo. Y aquí radica el único 'pero' que se le puede poner, un metraje excesivo al que un buen recorte en su tramo central le habría venido mejor que bien.
133 minutos de sustos son demasiados incluso para los amantes del género. Un pequeño lastre que hacía que esta secuela estuviera ligeramente por debajo de su primera entrega. Por centésimas, que nadie se alerte. Porque los objetivos se cumplen de manera más que holgada. Vuelven los escalofríos, las uñas clavadas en la butaca, los sobresaltos y los ojos (semi)tapados.
'Annabelle: Creation'
Puede que sea por el listón tan bajo que dejó 'Annabelle' o por la sensación de pereza absoluta que despertaba una secuela de aquella fallida cinta, pero lo que está claro es que en 'Annabelle: Creation', un título que ya tira para atrás con contundencia, no creía prácticamente nadie. Benditas (malignas) sorpresas. La película dirigida por David F. Sandberg, responsable de la lamentable 'Nunca apagues la luz', no alcanza el nivel de las dos entregas Warren firmadas por James Wan pero supera, con creces, a la primera entrega de las historias protagonizadas por la muñeca cinematográfica más famosa de los últimos años.
Aquí, directamente, funciona todo lo que fallaba en la propuesta de 2014, desde el ritmo narrativo al terror, pasando por el reparto y terminando en un guion mucho más medido de lo que pueda parecer. No es una gran película, le falta algo de garra y fuerza, pero es una historia de terror bien contada, efectiva y muy entretenida. Más que una sorpresa agradable.
'The Nurse'
No todo son largometrajes en el universo Warren, también queda espacio para los cortos. Partiendo de la iniciativa My Annabelle Creation Contest, un concurso orientado a encontrar los trabajos audiovisuales más potentes ambientados en este contexto creativo, Julian Terry consiguió triunfar con 'The Nurse', una historia protagonizada por una niña aterrada por los sonidos extraños que se escuchan en la habitación de una clínica en la que se encuentra ingresada. Más un apunte a pie de página que una pieza real del puzzle creado por Wan y compañía.
'La monja'
Siguiendo la tradición inaugurada por Annabelle, la aterradora monja que jugaba un papel secundario en 'Expediente Warren: El Caso Enfield' tendrá su propia película. Una cinta dirigida por Corin Hardy, responsable de la más que interesante 'The Hallow', que contará con la presencia protagonista de Taissa Farmiga y Demián Bichir. Detrás está, claro, Atomic Monster, la productora de James Wan. Un paso más dentro del universo Warren con el que, poco a poco, se sigue aumentando este gran monumento al miedo convertido en parque de atracciones terrorífico y divertidísimo.