El actor británico Alan Rickman ha muerto el jueves 14 de enero a los 69 años, víctima de un cáncer, según ha confirmado su familia a The Guardian. Para muchos siempre será recordado por interpretar al mítico profesor Severus Snape en la saga 'Harry Potter', pero no se puede reducir una increíble carrera a un solo papel, por mítico que sea.
Nació en Acton, Londres el 21 de febrero de 1946. Desde joven se interesó por la interpretación, comenzando con varios grupos de teatro experimental. Su primer trabajo como actor llegó en 1978 con la TV Movie 'Romeo y Julieta'. Tras muchos trabajos en la pequeña pantalla, llegó su primer papel legendario: el de Hans Gruber en 'Duro de matar'.
Después de enfrentarse a Bruce Willis llegaron papeles como 'El asesino del calendario', 'Un vaquero sin rumbo', 'Robin Hood, príncipe de los ladrones' o 'Sensatez y sentimientos'. En 2001 interpretó por primera vez a Snape en 'Harry Potter y la piedra filosofal', y empezó a conquistar a nuevas generaciones, convirtiéndose en uno de los actores más queridos de la saga y encumbrando al personaje. Después de su primer viaje a Hogwarts vinieron 'Realmente amor', 'Sweeney Todd: El barbero demoníaco de la calle Fleet' o 'El mayordomo de la Casa Blanca'. Tan importante fue su trabajo en cine como en teatro.
El Rasputín de oro
Rickman consiguió en 1997 un Globo de Oro y un Emmy por su papel en la TV Movie 'Rasputin'. También cuenta con un BAFTA por 'Robin Hood: Príncipe de los ladrones'. Se casó en 2012 con su novia de toda la vida, Rima Horton, y no tenía hijos. Todavía tenía por estrenar 'Eye in the Sky', que llega a Reino Unido en abril, y vuelve a prestar su voz a la oruga de 'Alicia a través del espejo'. Todos los potterheads estamos en deuda con uno de los más grandes actores secundarios que había en el cine actual, y que nos ha dejado demasiado pronto. Maldito cáncer.