A estas alturas hay dos cuestiones irrefutables de 'Spider-Man: Sin regreso a casa': que es un apabullante éxito de taquilla y que todo el equipo disfrutó tremendamente durante su rodaje. La nueva evidencia a este respecto nos llega de la mano de Andrew Garfield, actor que formase parte de una de las grandes sorpresas de la película, que por fin puede hablar de cómo ha sido la experiencia para él.
Después de meses mintiendo descaradamente (y disfrutando con ello), Garfield se siente libre compartiendo detalles de la producción, como aquel que desvela el lado juguetón de su compañera de reparto, Zendaya. El intérprete explica que una de sus escenas más cómicas se llevó cierto toque extra de risas gracias a la capacidad de improvisación de la mencionada actriz, que no dudó en sugerir un pequeño detalle que encantó al director de la película, Jon Watts.
"Al principio, Zendaya coge un candelabro o algo con lo que me amenaza en esa primera escena en la que entro, pero luego estaba aquella cesta de pan. Terminó siendo simplemente ella sugiriendo: '¿Puedo tirarle pan?' y [el director] Jon [Watts] dijo: 'Sí, tírale pan'", cuenta Garfield en el podcast Happy Sad Confused (vía Comicbook).
Feliz con el amor de los fans
Además en dicho podcast, Garfield ha vuelto a mostrarse muy feliz con la acogida que está teniendo su regreso. "Ese amor me ha llegado, y me ha llegado el disfrute de los fans en las salas de cine".
"Es muy conmovedor, lo encuentro profundamente conmovedor, porque cuando comenzamos mi segunda película de Spider-Man, [el interés] se desvaneció. Había una falta de conexión".
"Entonces, para mí, regresar y realmente tener más tiempo para divertirme y darle un cierre al personaje, y jugar y ser la versión de Spider-Man a la que siempre quise llegar, y estar con Tobey y Tom y el resto del equipo de la película... me llenó de paz. Fue un momento increíble con el que se cerraba el círculo".