El auge de la ultraderecha en los países desarrollados ha dejado patente que una parte de la sociedad amenaza algunos de los ideales más avanzados de nuestra sociedad. Un buen ejemplo de ello sería la última polémica que ha surgido en los Estados Unidos tras la emisión de uno de los últimos capítulos de la serie de Disney+, 'High School Musical: The Musical: The Series'.
"Desafortunadamente parece continuar su triste declive hacia la propaganda liberal", escribía Lindsay Kornick sobre la serie musical en Newsbusters. Toda esta indignación ha surgido después de que la serie mostrara a Carlos (Frankie Rodriguez), el coreógrafo de la escuela, preguntándole a Seb (Joe Serafini) que fuera su pareja del baile de 'Homecoming'.
"Lo único peor que la trama horriblemente aburrida y complaciente es que los medios lo glorifiquen" ... "Hollywood no se detendrá ante nada para normalizar cualquier degeneración y parece que Disney+ es solo otra plataforma para hacerlo", continuaba la periodista citando una entrevista en la que la actriz Sofia Wylie resaltaba el valor de ser una serie que normalizaba las relaciones del mismo sexo y representaba al colectivo LGTB.
"La serie asume que la gente fuera de Hollywood está pidiendo que sus hijos hablen sobre la orientación sexual. Lo que no podría ser más erróneo", finalizaba Kornick olvidándose de la cantidad de parejas heterosexuales que hay en la televisión y que podrían incitar a los niños a ser... heterosexuales.
¿Opinión aislada?
Por otro lado, Steve Warren (periodista de la radio cristiana de Pat Robertson) declaró en la CBN.com que esta serie es "El último ejemplo descarado de productores de medios infantiles que impulsan una agenda LGTB sobre niños. Hollywood y Disney se han pasado encumbrando la comunidad gay", añadía citando otros casos como la serie animada 'Arthur' o 'La Bella y la Bestia'.