Estados Unidos es un país que destaca, entre otras muchas cosas, por su racismo, especialmente el de sus policías. Por ello, Rami Malek, galardonado con el Oscar a Mejor Actor en 2019 por su papel como Freddie Mercury en 'Bohemian Rhapsody', ha relatado en una entrevista con The Guardian su experiencia con el racismo como persona estadounidense de padres egipcios.
"Me tiraron sobre el capó de un coche de policía porque alguien había atracado una licorería y le había robado a una mujer el bolso", relataba Malek. "Dijeron que el ladrón era de ascendencia latina y «Tú encajas en la descripción». Recuerdo lo caliente que estaba el motor, puede que hubieran estado corriendo por ahí y casi me quema las manos".
Por suerte del actor, ese día no estaba solo. Malek iba acompañado de un amigo que pudo aclarar a la policía su ascendencia. "Mi amigo, que era caucásico, fue lo suficientemente inteligente para decir «En realidad, señor, él es egipcio. No latino»", decía el actor, "Recuerdo reír sobre el capó del coche, pensando: «Vale, esta es una situación muy precaria. Puede que acabe en la cárcel por algo que no he hecho»". Afortunadamente todo quedó en un susto, pero Malek reconoce que le sigue preocupando la discriminación contra los inmigrantes, que podría empeorar con Donald Trump de nuevo como presidente.
Tristemente, está acostumbrado al racismo
Hasta que no hizo la película basada en la vida de Mercury, cantante de Queen, el actor no dejó de tener problemas cada vez que iba al algún aeropuerto, pues su nombre, Rami Said Malek, alertaba a los agentes de seguridad. "Empecé a pensar, «¿Qué está pasando?», cada vez que intentaba entrar en un país. Hoy en día, puede que tarden un minuto o dos, pero entonces dicen «Nah, es el chico de 'Bohemian Rhapsody'. Déjadlo pasar»", cuenta el actor.