Posiblemente si hablamos de los primeros trabajos de Robert Pattinson la mayoría del público se retrotraerá a su personaje en la saga 'Harry Potter' o a su Edward Cullen en 'Crepúsculo'. Pero tras la franquicia de vampiros el intérprete optó por cambiar su carrera y comenzar a protagonizar películas que se alejaran totalmente del público juvenil que le había encumbrado.
Aun así, parece que Pattinson ya está preparado para volver al cine más convencional y este año podremos verle protagonizando lo nuevo de Christopher Nolan y próximamente dando vida a Batman en la nueva cinta de Matt Reeves. En cambio, en una entrevista reciente el actor fue preguntado sobre sus últimos años en la industria y cómo cambió su percepción a la hora de elegir papeles (algo que según Pattinson viene de antes de los Cullen):
"Incluso antes de Crepúsculo, estaba haciendo cosas raras. Y para ser honesto, siempre pensé que Crepúsculo era bastante rara. Realmente fue el marketing el que la hizo convencional. Si miras cualquier entrevista que hice, estaría destacando la masticación de la placenta, cualquier elemento que pudiera hacer asqueroso, lo intentaba destacar. Pero sabes que un chico no puede competir contra todo el departamento de marketing diciendo: "Es una odisea romántica, es hermosa". Es como, 'No, es asqueroso".
Ni tanto ni tan calvo
Es cierto que los vampiros brillantes y que el personaje de Taylor Lautner acabase conformándose con la hija de Bella después de estar enamorado de su madre, podría calificarse como algo extraño dentro de esta saga mainstream, pero etiquetar 'Crepúsculo' como una franquicia underground parece excesivo.
Seguramente los responsables no estén preocupados sobre el tipo de película que son, teniendo en cuenta sus más de tres mil millones en la taquilla mundial. Esperemos que en el futuro Pattinson siga sorprendiéndonos con personajes extraños en películas tan interesantes como 'Good time' y 'El Faro'.
