Estado de alarma. Cuarentena. Confinamiento. Palabras que hace unos meses sonaban a película y ahora son el pan nuestro de cada día. Cada uno hemos llevado el aislamiento en casa para evitar la propagación masiva del coronavirus como hemos podido. Pero probablemente no tan bien como Russell Crowe.
El actor mantuvo una charla con Nicole Kidman en Variety, en la que le explicó que llevaba muchos, muchos años preparándose para algo así: "Bueno, Nicole, resulta que llevo tres décadas o más practicando el autoaislamiento. Resulta que soy muy bueno en ello y no tengo ningún problema en autoaislarme del resto del mundo". Añade que a lo largo de los años ha ido aprendiendo a "conseguir hacer muchas cosas sin subirme a un avión o ir corriendo de un sitio a otro".
Sin sus hijos
Aunque el confinamiento se le esté dando bien, lo está pasando lejos de sus hijos (Charles, de 16 años, y Tennyson, de 13) porque no quisieron irse con él al campo: "Estaba hablando con mis chicos, aquí mantuvieron los colegios abiertos un tiempo así que hubo confusión sobre qué iba a ir la gente. Al final, mis hijos decidieron confinarse en Sidney. Me sentí un poco ofendido porque es el campo, tenemos espacios abiertos, tenemos cosas increíbles aquí, ¿no? Pero ellos me dijeron: 'No, papá, hemos decidido que, en una pandemia, vamos a aislarnos en la parte del país más poblada rodeados de las zonas con mayores infecciones.' Y les dije: '¿os puedo preguntar por qué?'. Y el pequeño, que es demasiado sincero, me dijo: 'Uber Eats'".
La carrera de Russell Crowe también se ha visto afectada por la pandemia. El actor iba a estrenar este verano el thriller 'Unhinged', pero recientemente la película movió su estreno del 10 al 31 de julio, y es probable que acumule algún retraso más si la COVID-19 sigue desatada en Estados Unidos. La distribuidora quería que la película fuese la primera en llegar después del confinamiento, y de hecho la adelantó de septiembre a primeros de julio. Pero los rebrotes tienen a los cines todavía temerosos, postergando la reapertura.
