Es difícil pensar en Tom Cruise como una persona común, alejada del estrellato y del sofisticado y lleno de excesos mundo de Hollywood. Pero tal y como ha contado Curtis Armstrong a The Hollywood Reporter con motivo de la publicación de su nuevo libro, Tom Cruise no fue siempre una megaestrella y ha revelado algunos de los secretos más ocultos del actor cuando participó con él en la película 'Negocios riesgosos'.
El actor asegura que Tom Cruise al principio era "un mentecato, un chico ligeramente torpe e inseguro que interpretaba roles que cualquier joven podría hacer". A pesar de que no nos lo imaginemos así, Tom Cruise fue alguien corriente antes de participar en 'Negocios riesgosos', momento en el que "dejó de ser Tom" para convertirse en un personaje famoso conocido en todo el mundo y a ganar grandes cantidades de dinero.
Según Armstrong, cuando vio por primera vez a Tom Cruise apareció con esa perfecta sonrisa que todos tenemos en mente y que a tantas personas ha enamorado. "Luego me llamó Miles. Siempre me llamaba por el nombre de mi personaje. En ese momento, pensé que era parte de su proceso de interpretación. O podría ser que simplemente no sabía mi nombre", cuenta Armstrong en su libro. El caso es que después de aquella película tuvo un éxito sin precedentes y fue centro de atención no solo por sus papeles sino también por su vida personal y excentricidades.
"Un cristiano convencido"
Armstrong sintió sorpresa por el rotundo éxito de Cruise pero más aún cuando comenzaron los rumores sobre su homosexualidad. Para él, por lo menos en aquel momento, estaba muy clara su orientación, entre otras cosas por el affaire que mantuvo con Rebecca de Mornay durante el rodaje de 'Risky Business' y las pequeñas visitas de otras admiradoras. Según cuenta el actor, Tom Cruise en aquella época era un cristiano ejemplar y se dedicó a encaminar almas hacia el buen camino. Armstrong recuerda cómo Cruise se negaba a tomar una copa después de los rodajes y se recluía en la habitación alegando tener trabajo pendiente y "que le gustaba leer la Biblia antes de dormir", algo que le parecía bastante extraño.
Sin embargo, su devoción no era sino una excusa para ocultar algunos secretillos. Cuando Armstrong volvió tarde una noche encontró a tres o cuatro jóvenes muchachas en la puerta del cuarto de Tom. "Recuerdo haber pensado que Tom se enfadaría si estas chicas calientes interfieren en su lectura de la Biblia, por lo que les pregunté si hay algo en lo que yo pudiera ayudarlas", relata. Pero el caso es que Cruise sabía perfectamente qué hacían esas chicas allí y cuando Armstrong llegó, la puerta se abrió y salió una chica ajustándose el pelo, mientras la primera chica que hacía fila en la puerta, entraba en la habitación.
"Era un joven que sabía bastante sobre cómo gestionar el tiempo y entendía cómo manejar de forma exitosa el estudio de la Biblia y las mamadas", declara Armstrong con ironía, y añade: "Me fui esa noche solo a la cama pensando que me estaba bien empleado por no ser religioso". Parece que después de todo, el cristianismo de Cruise existía solo cuando le interesaba y le interesaba cuando estaba relacionado con placeres ocultos y no tan relacionados con la religión.
6 curiosidades de Tom Cruise
Dislexia curada
Parece ser que, de pequeño, Tom Cruise sufría dislexia. El actor causó un gran revuelo en el mundo médico al admitir que fue la Iglesia de la Cienciología la que le ayudó a curarlo. Cruise dijo haber aprendido la tecnología de aprendizaje desarrollada por el fundador de la institución, y entonces comprendió "cómo podía aprender absolutamente todo".
Sacerdote Cruise
Naturalmente, Cruise no siempre ha jurado obediencia a su amada Iglesia de la Cienciología. Tampoco parece haber querido siempre ser actor ni rodar escenas de acción peligrosísimas. A los 14 años, siendo aún católico, el ahora intérprete buscaba un camino profesional más espiritual al meterse en el seminario para convertirse en cura. Sin embargo, un año después acabó dejándolo.
Extraña hazaña
Tom Cruise es un hombre que ha conseguido grandes cosas a lo largo de su vida, y entre ellas se encuentra una curiosa "proeza" solo al alcance de muy pocos. Durante el año 1988, tuvo el curioso honor de ser el primer actor en la historia del cine en haber participado en la Mejor Película de los Oscar, 'Rain Man', y también en la ganadora del Razzie a la Peor película de aquel año: 'Cocktail'.
Tommy Montana
No, el título en referencia a uno de los personajes más carismáticos de la historia del cine no es una errata. Tom Cruise, al igual que el gran Bruce Willis, fueron unos de los tantos actores que hicieron el casting para ponerse en la piel de Tony Montana en 'El precio del poder'. Sin embargo, Brian de Palma no tuvo ninguna duda en que el legendario Al Pacino era el intérprete idóneo para el papel.
Más récords
No hay duda de que este actor ha tenido una carrera con grandes éxitos y, gracias a ellos, ha conseguido amasar una cantidad de dinero tremenda. Cruise es un pionero y un hombre de récords, y uno de ellos fue convertirse en el primer actor en conseguir que 5 films consecutivos suyos recaudaran 100 millones de dólares en los Estados Unidos, siendo ellos: 'Algunos hombres buenos', 'La tapadera', 'Entrevista con el vampiro', 'Misión imposible' y 'Jerry Maguire'.
Adicto a la adrenalina
Al gran Tom Cruise le va el riesgo, y es por ello que aprovecha cualquier película suya para disfrutar de un chute de adrenalina haciendo él mismo sus propias escenas peligrosas. Su doble debe de estar muy aburrido, porque el bueno de Tom lo hace todo por su cuenta. Nos tiene especialmente acostumbrados a ello en la saga 'Misión imposible', en la que en su última entrega iba cogido en el exterior de un avión en marcha con un par de cascarones.