El 5 de octubre llega a los cines españoles 'Venom'. Algo que tarde o temprano sabíamos que iba a ocurrir. ¿Cómo iban a desperdiciar la oportunidad de dar a los fans una película sobre uno de los villanos favoritos de Spider-Man? Pero ahí empiezan los problemas para 'Venom'. ¿Qué es Venom sin Spider-Man? Eso ha querido preguntarse Ruben Fleischer ('Tierra de Zombies') en esta película. ¿Consigue respuesta? Más o menos.
'Venom' es una historia de origen de manual, con un intenso opening, una presentación de personajes y una trama que solo empieza a rayar la superficie de todo lo que podría dar el simbionte de sí. Pero tiene un problema: ese simbionte está adormecido como si le hubieran lanzado un tranquilizante. Si habéis estado pendientes de las noticias, sabréis que finalmente la película no consiguió la calificación Rated R que una película sobre una criatura alienígena aficionada a desmembrar requeriría. Marvel-Sony tuvieron la oportunidad de arriesgar (como ya lo hiciera Marvel-Fox con 'Logan') pero finalmente prefirieron que todos los públicos pudieran acceder a los cines, siendo en Estados Unidos mucho más restrictivos con el tema de la edad.
Esta decisión elimina cualquier rastro de sangre o violencia medianamente gore de la película. Y 'Venom' la necesitaba para, sobre todo, destacar en un género tan superpoblado. Al final lo que tenemos es acción muy de película de cómics que, aunque entretiene, no aporta nada novedoso salvo un par de escenas bastante espectaculares. Los efectos visuales tampoco llegan a ser de primer nivel, comparado con otras películas del estilo que hayamos visto recientemente. De hecho, en el apartado visual, a veces hasta queda muy atrás, por ejemplo con las situaciones en las que la cabeza flotante de Venom habla con Eddie Brock, o todas las escenas de Riot. La persecución en moto por las calles de San Francisco funciona, también algunas de las peleas, ¿pero nos acordaremos de ellas en un futuro? Difícil. Sí nos habríamos acordado de cómo Venom parte a uno de sus enemigos en dos, pero al final no es esa película.
Y el caso es que Ruben Fleischer parecía tener ideas para hacerla así. Toda la parte en la que Eddie Brock se infiltra en el laboratorio de VIDA recuerda tanto al terror espacial de 'Alien: El octavo pasajero' y funciona tan bien que uno se pregunta por qué no siguió por ese camino. En su lugar, nos da un tono mucho más convencional, que tampoco llega a explotar la diferencia de centrarlo en un personaje creado para ser malo. Porque Venom ya no es tan malo como lo recordamos. Al no poder contar con Spider-Man, la película prefiere hacer una especie de Jekyll y Hyde y preguntarse dónde termina Eddie Brock y dónde empieza Venom. Una buena idea, que como toda película de orígenes solo empieza a fraguar y que está planteada claramente para seguir siendo desarrollada en más películas. ¿Lo bueno? Que este apartado, uno de los más importantes, funciona. Al menos del lado del huésped.
Porque el mayor acierto de 'Venom' es haber conseguido a Tom Hardy. Un actor que nunca hace el trabajo a medias. En este caso se convierte en un reportero algo "sobrado" que cree que hace un gran servicio a la comunidad pero en realidad es bastante pringado. Venom consigue sacar su lado más salvaje, y también el más valiente. Y desde que es un simple humano hasta que se convierte en el huésped del simbionte, Hardy lo da absolutamente todo en cada escena. A veces quizás hasta demasiado. Pero hace una interpretación por la que merece la pena pagar la entrada. Es histriónico, es muy exagerado, pero es cautivador. Lo importante: es memorable. Hace tan bien de persona que, a ojos de los demás, parece completamente desquiciado, que consigue que funcione esa dualidad de tener una criatura en su interior. Ayudado con el maquillaje para parecer enfermo, hace que nos creamos al cien por cien su papel. Es el alma de la película, y al menos el alma está más que conseguida. Su relación con Venom, además, va creciendo fantásticamente, y no negaré que deja con ganas de ver más.
El lado de Venom ya no convence tanto. Porque no es el Venom que esperábamos. Este simbionte acepta algunas de las reglas del juego que le marca Eddie (así que tan malo no es) e incluso "se cuelga" por el personaje de Michelle Williams. Ser un poco bestia no te hace un villano. Y aquí habíamos venido a ver la película de un villano. Pero Marvel sigue sin querer dárnosla. En su lugar se acerca más al antihéroe que sí, no cuenta con la virtud de los superhéroes buenos, pero tampoco resulta tan interesante de explorar. Como némesis de la película de una némesis tenemos a Riz Ahmed haciendo de un joven superdotado que cree que está salvando a la humanidad (cogiendo atajos, es decir, haciendo el mal) pero en realidad es el malo megalómano de siempre, completamente olvidable. Podríamos haber tenido dos villanos interesantes y el resultado es cero.
Pero con unas palomitas...
Pero a pesar de todo esto, también hay que decir que ya querrían muchas películas de este género tener el ritmo que tiene esta. Aunque la base tenga una gran cantidad de cosas que no llegan a cuajar, su duración por debajo de los dos horas y la velocidad con la que pasan las cosas hace que 'Venom' sea totalmente entretenida. Tom Hardy como guía en la película hace que no podamos quitar los ojos de la pantalla, y sus escenas de acción, aunque vistas mil veces, no se hacen excesivamente pesadas. Incluso llega a ser sorprendentemente graciosa por momentos (casi siempre gracias a Hardy), aunque no termine de quedar muy claro si era la intención o es algo indirecto. Al final la cinta pasa volando, y si uno va con la mente abierta y ganas de desconectar, eso lo cumple perfectamente.
Pero 'Venom' no debería haberse conformado solo con eso. 'Venom' tenía ingredientes para ser la película que por fin nos diera un estudio de un villano como dios manda. Tenía un director competente detrás, un reparto que desborda talento, y una herencia en los cómics que daría para decenas de películas sobre el simbionte. Podía haber tirado por el Rated R, y probablemente (como han demostrado 'Deadpool' o 'Logan') no habría pasado nada, incluso podrían haber tenido (lo más seguro) un taquillazo. 'Venom' tendría que haber destacado en un género que cada vez parece más repetitivo. Pero esa 'Venom' se va a seguir haciendo esperar. Y por desgracia Tom Hardy solo ocurre una vez en la vida.
Por supuesto, quedaos en los créditos. Hay dos escenas (y la primera deja con muchas ganas de más).
Nota: 5
Lo mejor: Tom Hardy, merece pagar la entrada por él. Entretiene, que ya es bastante.
Lo peor: Que Venom sea tan light. Que pudiendo innovar en todo, no innove en casi nada.