Crítica de "Esperando al Rey"
Sin spoilers
-Un filme de buenas intenciones e interesantes formas que no llega a ningún sitio. Puedo enumerar algunas virtudes, pero el conjunto me produce apatía.
-De una extrañeza casi admirable. Veo el filme con cierto cariño por la historia que cuenta y los esfuerzos de Hanks. Al final no tengo muy claro qué han querido contarme, ni porque lo han intentado de una forma tan caótica y poco atractiva.
Tom Tykwer es un cineasta que siempre ha sabido elegir historia interesantes y aportarles un estilo visual propio y un aura sensorial que en ocasiones le ha granjeado a sus cintas la categoría de culto. No obstante, desde la infravalorada The International protagonizada por Clive Owen y Naomi Watts; no ha hecho nada que llegara siquiera al aprobado raspado. Ahí tenemos de ejemplo perfecto su anterior obra, Cloud Atlas (El atlas de las nubes). Una estupidez pretenciosa y pseudo-filosófica que se alargaba hasta unas demenciales tres horas de duración. Sin embargo su nueva película pintaba interesante. En primer lugar era una adaptación de la elogiada novela de Dave Eggers, Un holograma para el rey. Después supimos que Tom Hanks sería el protagonista y la propuesta se volvió si cabe más apetecible. Su valoración en los premios del cine Alemán hizo el resto. Ahora bien, para poder visionarla hemos tenido que esperar a que llegara a los cines de nuestro país; ahora que lo ha hecho, he ido corriendo a ver como Tykwer nos narraba la historia de este alma perdida en medio del desierto.
Han pasado 24 horas desde mi visionado de Esperando al Rey y sigo con una sensación extraña en mi interior. Continúo pensando en las intenciones de la película, en su utilidad para el cine y para los espectadores, en la rara forma en la que está contada, en algunas escenas que siguen sin tener el más mínimo sentido. Tom Tykwer ha hecho una película en la que a priori pasan muchas cosas al mismo tiempo, pero si te fijas un poco en el núcleo del filme, te das cuenta de que realmente no está ocurriendo nada que merezca la pena ser visto. Al comienzo se nos presenta a Alan Clay, un empresario estadounidense arruinado y alejado de su familia que busca la redención en Arabia Saudí. Un hombre naufrago en un desierto, pero no de arena, sino de sueños rotos. Hecho pedazos por acción-reacción de un capitalismo inhumano cuya vida y posibilidades de felicidad caen en picado como en una montaña rusa infinita que parece que nunca acabará de bajar. Su último problema, un bulto en la espalda. Esa metáfora de las preocupaciones y la ansiedad que todos los que son como él sufren en su piel. Una metáfora nada sutil que se perdona por la capacidad de la película para transmitirnos cierta incomodidad. Y también sentimientos entremezclados de tragedia, perplejidad, tristeza, vacío, o la sensación de vivir en un mundo artificial y desconectado de cualquier humanidad. La película parece un filme de espera, un limbo nihilista y satírico (la excelente escena de la fiesta en la embajada danesa) con algo de pesadilla kafkiana, que aguarda un cambio en esa rutina inacabable en la que no hay diferencia entre días, meses y años. Cuando el cambio se produce, realmente todo sigue igual, Tywker parece querer decirnos que el cambio que necesitamos puede venir de lugares inesperados, o quizás que nuestras acciones sin aparente trascendencia pueden accionar ese cambio incluso cuando estamos dentro de nuestro limbo obsesionados con algo que resulta no ser tan importante, o que el destino está predefinido y sólo debemos quedarnos a la espera de lo que está por venir y la montaña rusa sólo baja o sube según reaccionemos a lo que nos depara. Realmente el filme está tan embarullado y sobrecargado de trivialidades que nunca llega a estar claro lo que quiere contarnos. De esta forma la película se hace pesada, se bifurca hacia muchas direcciones y nunca desarrolla ninguna de forma competente hasta el final en el que se revela como película romántica, brindando unas últimas tres escenas muy hermosas. Antes del desenlace,un entregado Tom Hanks consigue mantenernos en la historia metiéndose en la piel de un personaje cuya tragedia evoluciona a ritmo de una banda sonora tan ecléctica como humorística. Un personaje a medio camino entre un bufonesco Lawrence de Arabia, el personaje del actor en La Terminal y el de Náufrago.
Esperando al Rey llama la atención en su vertiente satírica, por su esencia de tragedia y su capacidad de transmitir ese limbo repleto de sensorialidad tanto positiva como negativa. No obstante pese a estos aciertos, algunas buenas escenas y un fantástico Tom Hanks; es una película dispersa, confusa, irritante en su triste amabilidad, en su repetición y su -sólo a medias- frívolo nihilismo. Nada entré géneros (drama romántico, comedia de enredos, crítica política/económica/social, enfrentamiento cultural, etc), tonos y mensajes sin llevar a ningún sitio en el que hacer pie.
Críticas de los usuarios
alesnake22
-Un filme de buenas intenciones e interesantes formas que no llega a ningún sitio. Puedo enumerar algunas virtudes, pero el conjunto me produce apatía.
-De una extrañeza casi admirable. Veo el filme con cierto cariño por la historia que cuenta y los esfuerzos de Hanks. Al final no tengo muy claro qué han querido contarme, ni porque lo han intentado de ...Leer más
Loden
La presencia de Tom Hanks en el reparto ha sido al menos para mí un buen reclamo, pero la película no ha alcanzado las expectativas, el argumento no me ha enganchado, me resulto y en algunos momentos no creíbles, no obstante me ha logrado distraerme durante casi toda la proyección.
Como puntos muy positivos es un documental sobre los contrastes de la ...Leer más
Críticas de los medios
Chicago Sun-Times
Un sueño despierto, bello y excéntrico (...) Ésta es, simplemente, una película hermosa de contemplar.
New York Times
Se necesita a un actor con la sutileza de Tom Hanks para transformar una historia de confusión, perplejidad, frustración y pánico en una comedia agradablemente incómoda.
The Hollywood Reporter
Aunque no sin sus torpes pasos en falso, la película en general muestra un Tom Tywker de vuelta y en forma tras el confuso revoltijo de 'Cloud Atlas'.
The Washington Post
Es la rara clase de historia sobre un pez fuera del agua en la que el pez consigue milagrosamente dejar de necesitar el agua y en su lugar, aprender a desear el aire.
The Guardian
Un caos disperso de tramas a medio cocinar que llegan a muy poco. La presencia afable de Hanks es lo que mantiene todo a flote.
Los Angeles Times
'Esperando al rey' es una película desconcertante (...) El problema no es que lo que hay en pantalla sea confuso, no hay nada ahí y ni siquiera la estrella Tom Hanks es capaz de mantener nuestro interés o atención durante mucho tiempo.