Para ver lo blanditos que somos ahora

Glenn Close hace un papel impecable.

Vemos una historia de aquellos tiempos, con los dolores y miserias de entonces y las luchas inmensas que tenían día tras día.

Pienso que siempre es bueno ver historias de otras épocas para aprender y para entender.

En estos tiempos de crisis, donde todos estamos fastidiados en mayor o menor medida, nos lamentamos de los buenos tiempos perdidos y no está de más ver la suerte que tenemos de vivir en este siglo.

Lo que ahora nos parece un dramón hace un par de siglos les habría dado la risa.

Todos las pasaban canutas.

Pero, como siempre, las mujeres nos llevábamos la palma...

Una mención especial a la actriz Janet McTeer: me ha parecido una actuación espléndida.

Sólo por ver su actuación y a Glenn Close, merece mucho la pena ver esta película.