Tranxylium

La cámara le juega una mala pasada. Frío, calor, frío, calor....y no termina de arrancar. Demasiados saltos, planos insulsos que sobran totalmente (algunos literalmente destrozan el rodaje), música que cambia o pasa al silencio bruscamente sin saber muy bien por qué, escenas de lucha mareantes en las que es difícil ver qué ocurre.... forman un batiburrillo caótico que le impiden despegar, coger el ritmo definitivamente y que nos sumerjamos en la historia de una vez por todas. A pesar de ello la película posee buenas tomas, como cuando aterrizan las naves o surcan el cielo causando vértigo y que junto con una adecuada banda sonora, una aceptable trama y unos detalles futuristas a lo Mad Max (tecnología evolucionada rudimentaria), alcanzan momentos de verdadera tensión. Los androides marca de la casa tampoco faltan a la cita e impresiona su realismo, así como el de algunos artefactos.

Jodie Foster hace un buen trabajo aunque poco exigente y Matt Damon no está en su mejor actuación. La introducción de su personaje es también bastante extraña porque no se termina de entender como un ex-convicto con un largo historial delictivo (sin que nadie nos explique cómo llegó a ello. De pequeño era maravilloso) sea un tipo realmente encantador. Chocante, aunque indudablemente Damon es uno de los bastiones de la cinta. Mención a parte merece el mercenario que adquiere un inesperado e inmerecido protagonismo al final del rodaje, solo justificable desde una perspectiva temática. Otros secundarios afortunadamente 'mueren' pronto y el papel de Fichtner es insustancial y estanco.

En cuanto al mensaje que trata de transmitirnos la película, hay que decir que es muy loable pero abusa de ciertas escenas que la hacen un poco pastosa, explícita y redundante. En definitiva me esperaba más de esta película parecida a District 9 en su fondo pero con notables diferencias en todo lo demás.