Naturalmente dirigida y con poderoso mensaje.

Todo empieza con las imágenes reales captadas móvil en mano por uno de los testigos que tuvieron la desgracia de presenciar los acontecimientos que tuvieron lugar ese fatídico fin de año de 2008 en una de las estaciones de trenes de BART, una red de metros y trenes de la bahía de San Francisco.

El poder de las imágenes fue tal que desencadenó una serie de grandes protestas y manifestaciones en todo el país en contra de la policía y a favor de Oscar Grant, un joven afroamericano de 22 años.

Película independiente de el debutante Ryan Coogler que fue premiada , entre otros, por el pasado festival de sundance 2013 como mejor película. Y es que no es para menos, a veces , como todos sabréis, no hace falta ir con grandes presupuestos, ni efectos especiales, ni grandes ideas, ni originalidad a raudales , ni actorazos de primera fila,ni un final inesperado, ni siquiera extraordinarios guiones para hacer una grandísima película . A veces es suficiente con mensaje y dirección.

Y este es el caso que nos acontece porque la dirección es magistralmente natural y sabe sacar el máximo partido a todo . Logra que te involucres tanto con el personaje que te acaba emocionando.

El mensaje no paras de verlo repetido en todas partes, redes sociales, anuncios, películas..... pero es un mensaje tan real y tan bien contado que por muy cansado que estés de el te atrapa como si fuera la primera vez que lo escucharas.

Disfruta todo lo que puedas la vida porqué tan rápido como vino se irá.