Henry Hathaway dirige este western ambientado durante la fiebre del oro estadounidense protagonizado por dos nuevos ricos, Sam (John Wayne) y George (Stewart Granger), que tras hacerse con el codiciado metal deciden asentarse en Alaska. Así George le pide a su socio Sam que vaya a Seattle en busca de su prometida. El conflicto surge cuando Sam descubre que la prometida de su amigo ya se ha casado y decide regresar a Alaska con Angel (Capucine), una bella bailarina con la que tratará de emparejar a George. Sin embargo finalmente la chispa surge entre Angel y Sam mientras esta trata de frenar las indeseadas atenciones de Billy (Fabian), el hermano pequeño de George, y los socios defienden su recién encontrada fortuna de los avances de Frankie (Ernie Kovacs), un timador dispuesto a dejarles con lo puesto.