Interesante sátira del tabaco

Aaron Eckhart no es un actor que me entusiasme mucho, de hecho me parece lo menos destacado de El caballero oscuro por poner un ejemplo pero tampoco me desagrada y en esta cinta ha sabido llevar bien su irónico personaje dejando momentos de risa aunque tampoco sin presentar una maravillosa interpretación.

Hace unos días vi la infravalorada Hombres, mujeres y niños y me sorprendió muchísimo el trato quizás un tanto exagerado pero emocionante sobre las redes sociales y con esta tenía ganas de ver como se trataba el tema del tabaco cuando tienes un hijo con el que no hay mucha conexión. El reparto en sí está correcto aunque son las escenas de Eckhart las que dan ese humor negro y divertido a la cinta más allá del reparto a modo de cameos prácticamente. Su guión resulta original por momentos y a la vez tópico por otros, gracioso a ratos pero a la vez tedioso en otros resultando ser un tanto plana. No la veo como una comedia al uso pero sí como una película que da mucho que hablar y que el mensaje que transmite es bastante correcto o al menos lo veo así. Cameron Bright está algo mejor que en películas como la saga Crepúsculo pero tampoco es que haga maravillas como dicen algunos premios.

En definitiva, buen debut para Reitman y a falta de ver Young adult, su última película sobre las tecnologías sigue siendo mi favorita. Interesante.