Secuela innecesaria

La primera 'Kung Fu Panda' me pareció una muy grata sorpresa, una prueba, junto a 'Como entrenar a tu dragón', de que Dreamworks podía hacerle la competencia a Pixar en cuanto a calidad. La segunda me resultó simpática, a pesar de ser más de lo mismo. Sin embargo, esta tercera entrega era innecesaria.

Claro que Dreamworks, que ha abierto sucursal en China, estaba obligada a sacarla. Una pena que eso no les llevase a pensar mejor la historia, que en este caso es otra vez lo mismo: Po es un desastre y tiene que hallar su poder para convertirse en el Guerrero Dragón. Es casi como si las dos primeras películas no importaran demasiado.

'Kung Fu Panda 3' es preciosa en el apartado estético, pero su historia flojea, y el humor no está tan conseguido como en las anteriores (demasiados chistes, y de muy bajo nivel). Aun así, entretiene, y gustará mucho a los más pequeños, que supongo que es a los que va dirigida la película. Como fan del cine de animación, no es para mí.