Curiosidades de 'Star Wars: Episodio III - La venganza de los Sith'
El montaje inicial del film tenía una duración de cerca de cuatro horas, una de ellas dedicada únicamente al rescate de Palpatine.
Los disfraces de Wookie que aparecen en este film iban equipados con un sistema de refrigerado que bombeaba agua helada para que el actor que lucia el traje no pasase demasiado calor.
Para algunas de las escenas del parto de Padmé, se utilizaron unas marionetas anatómicas como los bebés Luke y Leia. El encargado de manejarlas fue el actor Ewan McGregor.
El montaje del mundo volcánico de Mustafar se diseñó a partir de como pensaba George Lucas que debía ser el infierno.
George Lucas dejó que su amigo Steven Spielberg le ayudase a diseñar alguna de las secuencias en la preproducción. Spielberg quería experimentar con las técnicas de "pre-visualización" que estaba desarrollando ILM para utilizarlas en su film 'La guerra de los mundos'.
El director George Lucas añadió peso al traje de Darth Vader para que Hayden Christensen pareciese incomodo en el film.
''Star Wars: Episodio III - La venganza de los Sith'' es la única película de la saga que no ha sido nominada a los Oscars en la categoría de Mejores Efectos Especiales.
El actor Ewan McGregor le pidió a Lucasfilm un montaje con todas las escenas de Alec Guinness para poder estudiar su interpretación.
Las imágenes del volcán que vemos en Mustafar pertenecen a la erupción del Etna que se produjo en Italia mientras el film aún se estaba rodando.
Todas las escenas en las que aparece C-3PO tuvieron que ser retocadas digitalmente porque la pantalla verde se reflejaba en su carcasa dorada.