La mexicana

A Jerry Welbach le han dado dos ultimatúms. El primero viene de su jefe mafioso y consiste en traerle una pistola de incalculable valor llamada "The Mexican" o sufrirá las consecuencias. La segunda viene de su novia Samantha, que quiere que abandone su trabajo con la mafia. Jerry se centra en el de la pistola, pues prefiere vivir y tener problemas con Samantha antes que la otra opción, y cruza la frontera con Méjico, donde consigue el arma sobre la que pesa una terrible maldición. Mientras tanto, su novia ha sido secuestrada por el matón gay Leroy, como garantía para que cumpla su trato.