La víctima perfecta es el espectador

Ahora que estoy viendo viejas cintas que tenía descargadas y olvidadas en el otro ordenador he ido reponiendo para vaciar espacio o pasar las películas a dvd si me gustan pero sinceramente con esta cinta he conseguido lo primero y es una pena porque aparentemente la idea pese a estar trillada me llamaba la atención pero está muy mal ejecutada.

En términos de entretenimiento cumple sin ninguna duda con un buen ritmo y un par de momentos de tensión al final y se agradece que apenas dure 85 minutos pero de poco sirve el cuerpazo y actuación de Hilary Swank y la maldad de Jeffrey Dean Morgan alias el Bardem americano hablando en términos físicos no artísticos.

Es una pena que el guión desaproveche a actores como Christopher Lee que inesperadamente apareció en la cinta para desaparecer y no aportar nada salvo un plano de tensión que no lleva a ninguna parte. También aparece ya avanzada la historia el creciente Lee Pace que tampoco le esperaba y aunque no aporte nada en términos dramáticos ni apenas te importe su personaje es crucial para la motivación y celos del propio Morgan. La música es correcta dentro de lo que cabe marcando la tensión pero el guión está tan trillado, es tan previsible y tan mal cerrada que da lugar a lo risible, a lo inverosímil, a lo fantasioso e irreal. Un guión que se toma las licencias que quiere cuando quiere y donde quiere como lo del Mac y la cámara que ya es bastante absurdo que el propio Dean Morgan merodee por la casa de Swank y no sepa lo de las cámaras siendo lo calculador que es.

Tampoco hay un giro de guión que sorprenda ni apenas miedo que pueda intentar transmitir salvo lo de Swank y el espejo que es lo único que no me esperaba pero por lo demás es un thriller de terror flojo, sin chispa y sobretodo absurdo. Cuantos clavos habrán sido clavados y no muere el tipo porque el guión no quiere para ir rellenando minutos sin ton ni son, resulta hasta paródico más que algo serio.

En definitiva, una cinta floja que entretiene para pasar un rato entretenido en plan telefilm de sobremesa de Antena 3 donde la mujer es la que puede seducir y hacer lo que le de la gana como si fuera una luchadora profesional pero a la vez un poco tonta. No sé porque Hilary Swank y mucho menos Christopher Lee se pudieron meter en este proyecto de serie B. Floja.