Sopor espacial

Habrá unas cuantas excepciones, pero las películas basadas en videojuegos, sean de animación o con personajes de carne y hueso, no suelen gozar de una calidad abrumadora ni de buenas críticas. Y es que, en muchas ellas, como es el caso que nos ocupa, una historia plana y nada apetecible arruina por completo dichas adaptaciones.

El film, trata básicamente de una especie de zorro y un pequeño robot que, junto a otros Rangers Espaciales, deberán intentar frenar a un malvado villano, que trata por todos los medios de adueñarse de la galaxia. Son dos personajes muy populares que, desde 2002, se han convertido en fijos en la parrilla de videojuegos de las consolas de Sony, y cuentan con más de una docena de secuelas. La animación de esta adaptación, aunque no se puede decir que sea deficiente, queda a años luz de todo lo que están produciendo los estudios especializados en nuestros días. Pero lo catastrófico es el guion. Por mucha acción que haya, la trama nunca consigue alcanzarla y estar a la altura, convirtiéndose en un amasijo de ideas mil veces mostradas en pantalla, que puede entretener a los niños, pero debería decepcionar a todo fan de los videojuegos, y aburrir solemnemente a aquellos que buscan en las salas un producto con una mínima inteligencia. Nulo interés.