Jim Sheridan y Daniel Day-Lewis son una pareja de calidad

Pretensiones:

Teniendo en cuenta que he visto unos cuantos films de Jim Sheridan y que salvo la horrenda Detrás de las paredes no me gustó si que me encantaron todas sus cintas hasta la infravalorada Brothers así que al ver a Daniel Day-Lewis en pantalla una vez mas con el gran Sheridan me esperaba algo bueno y mas sabiendo que relaciona el boxeo con el IRA y habiendo visto las dos colaboraciones anteriores Mi pie izquierdo y En el nombre del padre.

Puntos positivos:

Una cinta intensa, desgarradora, emotiva, triste, alucinante, increíblemente interpretada por un buen reparto y por supuesto con una química impresionante entre el ganador de tres oscars a mejor actor Daniel Day-Lewis y la bella en la cinta Emily Watson (brillante en El dragón rojo y aceptable en War Horse). Una banda sonora rompedora, una dirección sublime por parte de Sheridan y un guión muy complejo y excelente. Escenas que se te quedan en la memoria, un guión que facilita el interés del espectador mediante escenas en las que perfectamente no salen los dos protagonistas y son tan importantes e intensas como cualquier escena romántica que te mantiene en vilo entre Watson y Lewis. Una historia convencional en su recta final pero a la vez imprevisible por algunas escenas bastante sorprendentes e inesperadas que no te despegan del asiento. Una cinta que merece ser mas reconocida y que está infravalorada, tan buena como Mi pie izquierdo.

Puntos negativos:

Una primera media hora algo lenta hace que el espectador que no sea cinéfilo se le pueda hacer un poco pesada además de saltar con la emoción hacia el final de la cinta cuando se podría haber tocado un poco antes como ya hiciera la anterior obra maestra En el nombre del padre. Además de un final demasiado predecible y convencional, quizás se podría haber tratado de forma mas inquietante.

Resolución final:

Una gran película, bien dirigida, bien actuada y sobretodo plausible durante sus 109 minutos que no te despega del asiento y que apasiona en sus escenas de boxeo que lo utilizan como un subgénero en la cinta pero que verdaderamente trata las consecuencias de ese terror llamado IRA que tanto daño hizo y que pese a que no se retrate de una forma tan profunda como ya lo hiciera la mejor cinta de Pete Postlethwaite, si que llega al corazón del espectador y merece mas reconocimiento. Muy buena.