Jackson que estás en los cielos...

Cómo apunté en un comentario reciente, este film me producía pereza y, tras salir de la sala, la primera palabra que me ha venido a la mente es decepción. Porque desde su tráiler intuía cómo había adaptado Jackson el libro, el cual debo decir, es superior.

Cuando lees un libro de estas características, el lector dibuja los mundos a su antojo, libre. Al pintarlos otro señor, sientes que adulteran tu imaginario.

Jackson domina la forma, el lenguaje cinematográfico para contar sus historias, pero inclusive en la trilogía que lo ha encumbrado, sus actores estaban mucho mejor. En su nuevo film, desaprovecha prácticamente a todo el reparto, reduciéndolos más si aún cabe a meros espectadores, para dejarlo en un mano a mano entre la narración de la chica muerta, y las acciones de su asesino.

Se centra en el envoltorio fatuo, intentando convencer a la audiencia con unos efectos especiales vistosos, pero que en los tiempos que corren y con la super-companía Weta de su propiedad, me resultan correctos. Es más, creo que se le ha ido un poco la mano con el rosa...

En la novela, Susie, contempla durante dos décadas el devenir de su familia, y cómo ésta acaba por ir aceptando que una vez se fue. En el film, si no es porque nombran alguna fecha, dirías que están en el mismo mes. Su narrativa es confusa y mal hilvanada a veces. La sensación de unos padres rotos por la perdida es nula. Lo aceptan desde la primera escena, continuando sus vidas tal cual, a excepción de algún momento provocado por el director para inducir a la pena.

Jackson narra el cuento de una forma pueril, al suprimir cómo Susie fue violada, asesinada y descuartizada, que otorga una oscuridad profunda al relato, que no el hippielandia del film. Me ha hecho gracia leer lo que ha escrito el compañero Federicocasado, comparando el cielo de Susie con un salvapantallas de Windows, sobretodo porque lo pensé al ver la escena del árbol.

También tuve dejà vú con el film de Robin Williams, "Más allá de los sueños" donde éste ya muerto, recorre su cielo particular a través de los cuadros de su mujer.

Stanley Tucci contruye un personaje hierático, pero su look y forma huele a asesino desde kilómetros; además, no me digan que el tío no se comporta sospechosamente siempre y los otros ni lo ven...

Una secuencia que me parece sonrojante y que de una patada me sacó del film, fue la llegada de la abuela (Susan Sarandon) a la casa, tras morir Susie y la madre abandonarla (de una forma abrupta sin explicación, con una Rachel Weisz perdida todo el metraje). De entrada, de afectada nada de nada y, el episodio musical-cómico que se marca poniendo lavadoras, cocinando, barriendo y demás, parece de una comedia con Julia Roberts (¿?).

Jackson pinta unos setenta francamente naif (colores brillantes y contrastados), y un buen rollito idílico-familiar con tufillo a telefilm del mediodía.

A destacar la forma de rodar algunas escenas, con travellings bonitos, angulares exagerados y angustiosos; un par de secuencias que mantienen una buena dosis de tensión; y un par de efectos originales como los barcos dentro de botellas de cristal rompiéndose en la playa. Playa que por cierto me recordó a la película Contact, cuando Jodie Foster entra en otra dimensión y ve a su padre.

Jackon articula una película predecible, que varía incluso el final del libro (Susie llega a comprender la naturaleza de su asesino). Su discurso es ñoño y algo pedante, dando la sensación de haber dirigido la cinta desde el estudio de efectos directamente. Una pena de oportunidad desperdiciada del creador de la superior "Criaturas celestiales". Lo dicho, Jackson que estás en los cielos, vuelve a bajar hombre...