Imaginación al poder
Sin spoilers
No contenta con realizar a destajo insulsos remakes tanto propios como ajenos, la industria cinematográfica norteamericana parece decidida a agenciarse a golpe de talonario a todo director de cine asiático más o menos talentoso, con la esperanza de crear un producto medio decente.
Pero ni por esas.
Como si de un rey Midas gafado se tratase, EE.UU (o su dinero) parece pervertir la creatividad de guionistas y directores; y sino, que se lo pregunten a John Woo.
Pues bien, The messengers es uno de estos productos.
Dirigida por los hermanos Pang, que en su día consiguieron estremecer a buena parte de las salas con películas como The eye o la más reciente Re-cycle, The messengers se sirve de todos los tópicos habidos y por haber en el cine de terror universal: casa encantada, espíritus aparentemente cabreados pero que en realidad son almas en pena, sombra aquí, sombra allá, maquíllate, maquíllate...
Si el producto final fuera algo relativamente original, no habría ningún problema con ello: pero, mal que me sepa, The messengers no lo es.
La película narra la historia de una típica familia norteamericana, los Solomon, cuyos problemas económicos en Chicago les han forzado a probar suerte en el campo. Así, la familia compuesta por Roy (Dylan McDermott), Denise (Penelope Ann Miller) y sus hijos Jess (Kristen Stewart) y Ben (Evan y Theodor Turner), comprarán una granja desvencijada y perdida de la mano de dios con la intención de vivir de la cosecha. Todo parece ir relativamente bien en un principio, e incluso contratan a un trabajador (John Corbett) para que ayude a Roy con la cosecha, pero todo cambia de manera radical cuando la joven Jess comienza a presenciar extraños sucesos, centralizados en el sótano de la casa.
Como decía, The messengers es poco original hasta en los nombres de los personajes: la historia es absolutamente previsible, con sustos previsibles, con una música estridente totalmente previsible, con diálogos previsibles, y con un desenlace inesperado totalmente previsible. Las actuaciones, sin llegar a resultar (del todo) risibles, tampoco son nada del otro mundo, algo que por otro lado ya era de esperar, pero es que tampoco lo son los efectos especiales, anclados desde hace ya algunos años (La maldición, 2005) en pintar de gris a un niño y a su madre y hacerlos caminar en plan contorsionista de circo.
Resumiendo: The messengers es la imaginación al poder.
Críticas de los usuarios
JasonBourne16
No esta nada mal, entretiene, pero ni asusta ni nada, en general esta bien. Previsible y en algún momento aburrida. Podía haber dado mas de si.Leer más
samlot
Leí el otro día en una de las noticias que un director de una película titulada ''An american Girl'' (creo) quería que Kristen Stewart fuese la protagonista de su película y que ella podía darle la oportunidad de Oscar.
Así que, tras leer eso, me he dicho, si esta chica puede conseguir un Oscar tengo que conocer un poco mas su ...Leer más
goethemola
No contenta con realizar a destajo insulsos remakes tanto propios como ajenos, la industria cinematográfica norteamericana parece decidida a agenciarse a golpe de talonario a todo director de cine asiático más o menos talentoso, con la esperanza de crear un producto medio decente.
Pero ni por esas.
Como si de un rey Midas gafado se tratase, EE.UU ...Leer más