Realidad profunda en Tres Anuncios en las Afueras

Esta película, Tres Anuncios en las Afueras, nos puede parecer de entrada demasiado distante respecto al mundo que nosotros conocemos, es decir, alejada de las reacciones de la sociedad española. Sin embargo, esta distancia, que nos lleva a la realidad profunda de la Norteamérica densa, debe ser entendida en este mismo entorno, desde su propia perspectiva, y con su escala de valores concreta. En este sentido es una historia muy auténtica, y de hecho, incluso la iniciativa de las vallas publicitarias para reclamar el esclarecimiento de un asesinato caído en el olvido, está basada en hechos reales, como podemos rastrear en el caso de Shannon Siders, muerta a manos de un grupo de jóvenes de su propio círculo de conocidos, en un pueblo pequeño de la América rural. El padre de Shannon, dolido ante la impasible actitud de las autoridades policiales, utilizó el mismo recurso que el personaje magníficamente interpretado por la siempre sólida Frances McDormand. La violencia excesiva es inherente al comportamiento común en este tipo de lugares cerrados y enmarcados en un submundo único, que se mueve al compás de sus propias reglas.

Lo que me resulta más curioso o impactante es el proceso de cambio en las actitudes que se va produciendo. Es quizás el elemento que más valor le da al film en general, al menos desde mi punto de vista, a pesar de que es un cambio un tanto extraño en su evolución.

Hay que verla para juzgar.