Visionarios

La historia transcurre durante la segunda república española (1931-1936). Cuenta la historia de Joshe (Eduardo Noriega), un hombre que está enamorado de Usúa (Ingrid Rubio). Y ese amor es correspondido. Todo esto ocurre en un pueblo del norte de España, donde se ha aparecido la virgen llorando, vestida de negro, y con una estampita y una espada entre las manos. La virgen predice una gran guerra. Un grupo de jóvenes que son quienes aseguran haberla visto, creen en la profecía a pies juntillas. Y los valles del país vasco se llenan de escépticos y de creyentes que están esperando para ver a la virgen como les paso a los otros chicos. Entre los creyentes que quieren ver a la virgen se encuentra Usúa.