Cada par de zapatos tiene su historia....

Pues tampoco esta tan mal, eso es lo que yo pienso después de haberla visto. Un rol diferente para Adam Sandler que aquí es Max, un zapatero que trabaja en una pequeña tienda de barrio, un zapatero de tradición, que viene de generaciones anteriores en las que todos han sido zapateros. En la pequeña tienda hay una vieja máquina, en el sótano, una máquina que tiene un secreto. Creo que la película es simpática y no hay que darle mas importancia de la que tiene; está repleta de tópicos y clichés sobre los judíos y su trama se va convirtiendo en un enredo, que en mi opinión se deja ver; también se olvida, pero es entretenida y no aburre. Creo que el punto de partida es bueno, y la idea esta bien, también creo que como comedia no es de las que vas a reírte mucho, tiene sus momentos, pero el argumento va un paso más allá, es algo mas profundo, con mensaje. Una buena música de fondo, que le da muy ambiente y hay que decir que el tema principal, puede que ya lo hayamos visto en otras películas, quien no ha querido cambiarse por otra persona, ser otro y vivir como otra persona, aunque sea durante un rato; pues eso es de lo que va. Con Sandler tenemos a Steve Buscemi que es Jimmy y Dustin Hoffman como Abraham Simkin, y todos ellos cumplen bien con su parte; con buenos momentos, ocurrentes y divertidos y tramos mas flojos, pero como en todas las películas, creo yo. Yo he pasado un buen rato y no me ha aburrido, ni me ha parecido tan mala como me la presentaban.